Lucas 11:1-4 describe cuando Jesús enseña a sus discípulos cómo orar, pidiéndoles que se dirijan a Dios como "Padre nuestro", honren su nombre, pidan que llegue su reino y se haga su voluntad, soliciten el pan de cada día, y pidan perdón por sus pecados, perdonando también a quienes les ofenden.
El contexto (Lucas 11:1)
Un día, Jesús estaba orando y, cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: "Señor, enséñanos a orar, así como Juan [el Bautista] enseñó a sus discípulos".
La enseñanza de Jesús (Lucas 11:2-4)
Jesús les dice que cuando oren, deben decir: "Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra".
Continúa con la petición: "El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy".
Y la solicitud de perdón y el compromiso de perdonar: "Y perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todos los que nos deben".
Qué significa esta oración
Los discípulos le piden a Jesús un modelo de oración, ya que la oración no es solo un grito del corazón, sino también un aprendizaje.
La oración del "Padre Nuestro" enseña a los creyentes a ver a Dios como un Padre amoroso, reconocer su santidad y esperar la llegada de su reino y la realización de su voluntad.
También incluye la necesidad de confianza en la providencia divina para las necesidades diarias, el arrepentimiento y el perdón de los pecados, y la fortaleza para enfrentar la tentación.
Lc 11, 1-4 narra la enseñanza de Jesús sobre la oración, proporcionando una versión más breve del Padrenuestro en respuesta a la petición de uno de sus discípulos.
El texto bíblico de Lc 11, 1-4 registra que un discípulo pidió a Jesús que les enseñara a orar. Jesús respondió enseñándoles una oración que comienza con "Padre" y pide la santificación de su nombre y la venida de su reino. Continúa solicitando el pan diario, el perdón de los pecados (en relación con perdonar a otros), y protección contra la tentación. Este pasaje, ubicado en el evangelio de Lucas, presenta una versión más breve del Padrenuestro en comparación con Mateo. El pasaje subraya la relación con Dios como "Padre", la importancia del perdón mutuo, y la dependencia de Dios para las necesidades y la protección.
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